jueves, 9 de julio de 2015

Articulación temporomandibular (ATM)

¡Buenos días a todos! ¿Qué tal estáis? Desde la clínica dental Hnos. Domínguez Aramendi esperamos que llevéis buena semana. ¡Ánimo que es Jueves!

Hoy nos asomamos de nuevo por aquí para hablaros de la articulación temporomandibular.
¿Dónde está dicha articulación?
 
Como podemos ver en la foto anterior, se encuentra entre el hueso temporal y la mandíbula  y su función es básica: permitir el cierre y la apertura de la boca. Se utiliza al masticar, hablar, tragar, bostezar, en diversas gesticulaciones faciales, etc.

Cuando las ATM funcionan correctamente, puedes cerrar y abrir tu boca sin molestias ni dolores. Cuando hay alguna clase de dolor, es porque alguna de sus partes (muscular, ósea o nerviosa) ha perdido o disminuido alguna de sus funciones.

¿Qué síntomas pueden hacernos pensar que nuestra ATM tiene problemas?
 
  • Dificultad o molestia al morder o masticar
  • Chasquido al cerrar o abrir la boca (o ambas)
  • Dolor facial sordo en la cara
  • Dolor de oído
  • Dolor de cabeza
  • Dolor o sensibilidad en la mandíbula
  • Bloqueo de la mandíbula
  • Dificultad para abrir o cerrar la boca
 
¿Puede el dentista diagnosticarnos problemas en la ATM?
 
Sí. El profesional realizará todo lo que crea pertinente, así como preguntas relacionadas con tus hábitos, costumbres... y una observación exhaustiva tanto intraoral como extraoral.
 
 
En el caso de que el dentista me diagnostique una disfunción en la ATM, ¿qué tipo de tratamiento tendré que llevar?
 
Eso son aspectos que claramente tiene que decidir el profesional, ya que resulta totalmente diferente en unas personas y otras.
Aún así, los tratamientos que se suelen seguir son los siguientes:
 

Postural: control o prohibición de ciertas posiciones de descanso para evitar que la mandíbula presione contra el maxilar superior, como dormir de lado o boca abajo y meter la mano o el brazo debajo de la almohada, como apoyar en la mano la cabeza estando sentado; hablar lo menos posible y sobre todo por teléfono; control o prohibición de actividades físicas que conlleven flexión del cuello con protrusión mandibular durante horas, como pueden ser labores de costura (coser, calar, máquinas eléctricas, etc.) uso de ordenadores, lecturas prolongadas sin uso de atril, etc.; en general cualquier ejercicio físico mantenido tensionalmente en el tiempo con una postura corporal de cuello flexionado ya que demanda una protrusión mandibular
 
Oclusal: equilibrar eliminando las dobles oclusiones con tallados selectivos, prótesis, etc., para corregir las céntricas; indicar el lado de masticar, comer blando y prohibir chicle, pipas, comerse las uñas, etc.
 
Aparatología: equilibradores invertidos para evitar posturas protrusivas ( El empujar o impulsar hacia adelante) y subir la dimensión vertical para aumentar el espacio de separación entre la mandíbula y el maxilar superior; prohibir el uso de cualquier tipo de férula.
 
Quirúrgico: exodoncias, eliminación quirúrgica de la tuberosidad del proceso alveolar del maxilar superior.
 
¿Tienes algún tipo de molestia o dolor en la articulación temporomandibular? ¿Crees que alguno de estos síntomas se asemejan a los que tú tienes? ¡Visita al odontólogo!
Él descartará o diagnosticará lo conveniente y tú por fin podrás darle nombre y solución a esa molestia.
 
Antes de irnos nos gustaría enseñaros unas fotos de nuestra clínica:
 
Este es nuestro logotipo. Tiene su historia, y algún día la contaremos. ;)
 
¡Esta es nuestra bonita y verde sala de espera! Está decorada con los títulos de Julio César.
 
Esta de aquí es una parte de nuestra fachada.
 
 
 
¿Os ha gustado? ¡Esperamos que sí!
Estamos en Logroño, en C/Estambrera nº5C, en la zona de Cascajos. Nos encantaría poder recibiros en nuestra casa. 
 
 
Si os ha quedado alguna duda con respecto a la ATM o con respecto a  alguna entrada anterior, no dudéis en poner un comentario y responderemos tan brevemente como podamos.
Hoy habéis entrado un pasito más en nuestra vida, esperamos que podáis entrar mucho más.
 
¡Gracias un día más a todos!

martes, 7 de julio de 2015

Bruxismo. ¿Qué es?

¡Buenos días desde la clínica dental Hnos. Domínguez Aramendi, en Logroño!
¿Qué tal estáis hoy?

Hoy estamos de nuevo aquí para hablar sobre el bruxismo.
Primero, ¿qué es?
El bruxismo es un hábito involuntario de apretar o rechinar las estructuras dentales sin propósitos funcionales. Este hábito involuntario en un principio puede parecer inofensivo, pero si lo tenemos como hábito puede llevarnos a dolores de cabeza y músculos de la mandíbula, cuello y oído.
El rechinamiento puede producir desgaste de los dientes y molestia en la gente de alrededor.

Este hábito afecta a ambos sexos por igual, a niños y adultos.

El bruxismo puede clasificarse en:
  • Bruxismo céntrico: (apretamiento), daña el cuello de los dientes provocando generalmente abfracciones cervicales, siendo los premolares las piezas más comúnmente dañadas por su posición en la mandíbula. Además de acompañarse de cefaleas tipo tensional.
  • Bruxismo excéntrico: daña el borde incisal y oclusal de los dientes generando atriciones en distinto grado. Los movimientos excursivos de la mandíbula siguen un patrón definido que se relaciona con el desgaste en las piezas (al momento de deslizar los dientes, los desgastes son coincidentes), afecta mayormente a incisivos
Ambos bruxismos pueden afectar de manera simultánea a una persona y además, suelen confundirse con otras lesiones no cariosas provocadas, por ejemplo, por un cepillado traumático.

El bruxismo ocurre en diferentes partes del día y de diferentes maneras:
  • Mientras dormimos: (somos inconscientes) Generalmente, el paciente bruxómano nocturno no es consciente del problema, y los datos de esta parasomnia proceden de los compañeros de cama o habitación alarmados por el ruido de los dientes, y también de los dentistas que observan la destrucción del esmalte y la dentina.
  • Durante el día: Ocurre durante la vigilia, generalmente de manera inconsciente asociada a periodos de estrés laboral

Y bien... os preguntaréis: ¿Qué solución podemos ponerle a todo esto?
Para empezar, como ya sabemos, visitar al dentista para que éste nos diagnostique correctamente el bruxismo u otra patología que pudiéramos tener.
¿Qué elementos o hábitos pueden corregir esta costumbre?

  • FÉRULAS OCLUSALES: La férula o guarda oclusal trata el síntoma y no la causa. Es el tratamiento por tradición y más comúnmente implementado por los odontólogos generales. El paciente la utiliza de día (diurno), de noche (nocturno) o todo el día en los casos de bruxismo intensa. Puede ser confeccionada de acrílico o de un material más liviano como la silicona. Las férulas confeccionada con acrílico son económicas y complejas de realizar por la diversidad de pasos y el uso de laboratorio para su recorte y pulido, son incomodas para el paciente y muy rígidas para producir un contrapeso al frotamiento excesivo. Las férulas de silicona son livianas, dóciles y cómodas para quien la usa; durante el frotamiento se reduce la fuerza de contacto entre la férula y los dientes.
 
 

  • RELAJACIÓN: En algunas personas, sólo la relajación y la modificación de comportamientos diurnos son suficientes para reducir el bruxismo nocturno. Se suele implementar la relajación de la musculatura corporal como alternativa viable para la reducción y eliminación de los estados de nerviosismo, estrés y ansiedad.

Esto ha sido todo... ¡Gracias por leernos un día más! La próxima entrada estará relacionada con la articulación temporomandibular (ATM)

¡Qué paséis un buen Martes, cuidado con el sol!

lunes, 6 de julio de 2015

¿Por qué visitar al denista...

si no me duele nada?

Ésta es la pregunta que mucha gente se formula. ¿Por qué debemos acudir al dentista aunque no nos duelan ni los dientes, ni las encías, ni nada que esté relacionado con la cavidad oral?

La mayoría de las personas temen tener que ir al dentista y en muchas ocasiones lo evitan a toda costa hasta que al final no les queda más remedio que ir porque les duele algo (importante no tener que llegar hasta este límite, exceptuando cosas que vienen de imprevisto) o porque empiezan a darle la verdadera importancia que tiene.

Acudir al dentista para que nos realice una buena revisión odontológica nos ayudará a prevenir de los problemas dentales que nos puedan surgir en un futuro, así  como también nos dará soluciones y tratamientos a los problemas bucodentales que podamos tener en este momento, como por ejemplo caries, periodontitis, gingivitis, enfermedades de las encías, bruxismo…

Las caries, como mucha gente sabe, cursa sin dolor hasta que ésta misma llega al nervio. En esa etapa de la caries es cuando realmente duele, y cuando la persona sabe que algo tiene.
Podemos aprender a autoexplorarnos enfrente del espejo para poder reconocer las caries antes de que lleguen a ese límite, ya que en ciertas ocasiones la única solución que existe es la endodoncia. (matar el nervio) 
Es mucho más sencillo, menos costoso y menos dañino realizar una obturación.

¿Por qué debemos acudir al dentista aunque no duela nada?
Te puedo dar algún ejemplo...

Estética: Si tienes una boca sana lucirás una sonrisa bonita, blanca y recta. Te ayudará a sentirte bien contigo mismo.

Conservación de nuestros dientes: para que éstos estén más fuertes y sanos durante el máximo tiempo posible. Recuerda que todo lo natural es mejor que lo artificial.

Prevención de enfermedades: Como ya hemos visto en entradas anteriores, en nuestra boca se pueden reflejar otro tipo de enfermedades que no están relacionados con la cavidad oral, así como las que sí lo están. Lo mejor para prevenir enfermedades y estar al tanto de lo que tenemos o no tenemos es acudiendo al dentista con una simple revisión general.

Ahorro: Ir al dentista de forma regular te supondrá gastar menos dinero, ya que con las revisiones tu dentista podrá detectar cualquier anomalía y cogerla antes de que sea demasiado tarde y a tu bolsillo le pueda salir caro.


¿Te hemos convencido...? Alguna de esta información ha sido sacada de http://www.igbdental.com/es/blog/importancia-de-acudir-al-dentista

¡Muchas gracias por leernos! Para cualquier duda, sugerencia o similar sólo tenéis que escribir un comentario y os contestaremos con la mayor brevedad posible.

Muchas gracias de nuevo y ¡cuidado con el sol! Que últimamente está que aprieta...

viernes, 3 de julio de 2015

La enfermedad periodontal

Muy buenos días a todos! ¿Cómo estáis? Esperamos que sonriendo mucho...
¡Aquí en Logroño con un calor de verano total!

Hoy veníamos a hablar sobre la enfermedad periodontal. Todos habréis escuchado muchas veces y habréis sentido en primera persona eso de... "Tengo inflamadas las encías" "Me duelen si me rozo" "Me sangran las encías si me cepillo los dientes" "Noto un dolor intenso sobre la encía" "Es como si sobre la encía tuviese rabia" ...
¿De dónde viene esto? ¿Qué diferencia hay entre unas enfermedades y otras? ¿Cómo tengo que tratarlas? ¿Es peligroso? ¿Irreversible?

¡Ahora vamos a tratar de contarte todo!

¿Qué es la enfermedad periodontal?

La enfermedad periodontal es una infección multibacteriana que afecta a las encías produciendo inflamación, enrojecimiento y sangrado de las mismas. A esto se le denomina gingivitis.
Para entendernos, la gingivitis tiene una fácil solución y una cura rápida. Pero cuidado: no debemos dejar que esto continúe y avance, ya que desembocará en una periodontitis conocido comúnmente como piorrea que es una afección crónica de las encías en la que, además hay pérdida de los tejidos que rodean al diente.

¿Cómo podemos notar eso nosotros? ¿Cómo cambia nuestro cuerpo si lo que tenemos es periodontitis?
Fácil: Nosotros notaríamos que el diente está más flojo y más móvil, así como más largo. Llegados a este punto, podríamos perder nuestros dientes.

 
Os dejo un par de fotos para que veáis la diferencia
 
Se muestra inflamación de las encías
Se muestra una clara pérdida de encía que anteriormente rodeaba el diente




 
 ¿Por qué se forma la periodontitis? Está causada por la acumulación persistente de placa debajo de la línea de las encías: si no se elimina, la placa evoluciona a sarro (PLACA > SARRO) provocando un aumento de la inflamación y sangrado. Las encías comienzan a retroceder.

Como sabemos, las cosas no se curan solas... y si dejamos que esta periodontitis continúe, progresará a una periodontitis avanzada. Esto es por la acumulación de bacterias que hacen que las encías retrocedan más y los dientes pierdan el agarre.



Aquí mostramos una periodontitis avanzada
 
Como podemos ver en la fotografía, los dientes parecen prácticamente sueltos y da la sensación de que pueden caerse en cualquier momento, ya que han perdido toda sujeción.
 
Estas enfermedades, ambas, deben ser tratadas correctamente, ya que como hemos explicado antes es parecido a un círculo vicioso:
tenemos gingivitis > la ignoramos > avanza a una periodontitis > la ignoramos > pasa a una periodontitis avanzada... y la cura es más tediosa y costosa. Si en la gingivitis hubiéramos puesto remedio con una limpieza de las encías o algún medicamento prescrito por el odontólogo, éste círculo se hubiera parado en la primera fase.
 
¿Cuál es el tratamiento de la enfermedad periodontal?
  1. Como primer paso y fundamental, VISITAR AL DENTISTA.
    Las visitas regulares al dentista son una parte esencial de una buena higiene bucal. Indica al dentista si padeces o has padecido algún síntoma o problema bucal inusual entre una visita y otra.
  2. CLORHEXIDINA (CHX) la clorhexidina es un componente activo de algunos colutorios diseñados para tratar al enfermedad periodontal. Estos colutorios funcionan eliminando la placa bacteriana que provoca la enfermedad periodontal y ofrecen protección al adherirse a los dientes y encías.
  3. LIMPIEZA PROFESIONAL
    La limpieza profesional es la eliminación de la placa dental para reducir y evitar la inflamación de las encías y, así, la enfermedad periodontal. Solo deben realizarla dentistas o higienistas dentales cualificados.

    Si tienes gingivitis, tu dentista o higienista dental te hará una limpieza a fondo utilizando un instrumento especial y pulirá los dientes con una pasta arenosa.

    Si la enfermedad periodontal ha progresado hasta periodontitis, puede ser necesaria una limpieza mayor o curetaje para retirar la placa y el sarro de las bolsas que se han formado. Para ello podrías tener que hacer varias visitas al dentista o higienista. Puede que necesite anestesiar las encías antes del curetaje y es posible que sientas algunas pequeñas molestias después. El dentista o higienista controlará el tamaño de las bolsas durante los siguientes meses para asegurarse de que el tratamiento ha sido satisfactorio y la periodontitis no empeora.
    ¿Qué pasa si la periodontitis está muy avanzada y esos tratamientos ya no nos hacen efecto?
    Si la periodontitis es más grave, las bolsas pueden ser demasiado profundas para que el dentista o higienista las limpie simplemente mediante un raspado y alisado de las superficies radiculares. Es posible que necesites cirugía. El dentista puede derivarle a un periodontista, un dentista especializado en tratar la periodontitis. Este profesional le hará una limpieza más extensa y más profunda, junto con otros ajustes del tratamiento
 
Bueno, chicos y chicas... como veis la enfermedad periodontal no es un juego ni algo que podamos dejar pasar, se trata de nuestra salud lo primero, y lo segundo nuestro coste económico, nuestro tiempo y nuestro bienestar.
Por favor, la gingivitis tiene una cura sencilla y no impacta de tal manera en nuestra boca como la periodontitis, que como habéis podido comprobar es muy agresiva y nada estética. 
 
¡Hasta aquí hemos llegado hoy, Viernes!
Esperamos desde la clínica dental Hnos. Domínguez Aramendi que hayáis aprendido con esta nueva entrada, que cuidéis mucho de vuestra salud y ¡que paséis un muy buen fin de semana! Cuidado con el coche, que empiezan las vacaciones y ¡hay que disfrutar!
Un abrazo muy fuerte, gracias por leernos.


jueves, 2 de julio de 2015

El embarazo y la salud oral

¡Buenos días! ¿Qué tal estáis? ¡Esperamos que sonriendo mucho!
Hoy os traemos una nueva entrada relacionada con el embarazo y en cómo puede afectar éste en la salud oral de la mamá.

El embarazo, como todos sabemos, comporta una serie de cambios orgánicos y de conducta que pueden repercutir en la cavidad bucal provocando un mayor riesgo de caries y de enfermedad de las encías.

Hay algunas mamás que después de dar a luz y contar su experiencia a los demás, tienden a decir que
“cada embarazo le costó un diente”.
No sé si alguna vez lo habrás escuchado... pero no tiene por qué ser así si mantienes una correcta higiene de tu boca y elaboras una dieta sana.
Consejos:
  1. Cepillar dientes y encías cuidadosamente dos veces al día. (Recalco cuidadosamente. Las encías son muy sensibles y podrías dañarlas)
  2. Usar un cepillo suave y pequeño para evitar náuseas
  3. Utilizar pasta dentífrica fluorada.
  4. Limitar los alimentos azucarados en las comidas y no entre horas (y diréis... ya, y los antojos, qué?! siii, está permitido... pero de vez en cuando sólo, eh...)
  5. Prefiere la futa fresca en lugar de zumos industriales (Suelen ser altamente azucarados)
  6. Evita las bebidas carbonatadas
  7. Mastica chicle sin azúcar y con xilitol
También sabemos que algunas mujeres embarazadas durante este período sufren esporádicamente o asiduamente náuseas y vómitos. El ácido que sale del vómito, si éste es expulsado con frecuencia, provoca -entre muchos otros- pérdida del esmalte dentario en la cara interna de los dientes. Por tanto, aumento en la producción de caries.
Daños en las encías, el paladar y la garganta, produciendo inflamación de los mismos. Las manos u otros elementos introducidos para estimular el vómito pueden provocar heridas en la garganta y el paladar, que en ocasiones llegan al sangrado.
Las glándulas salivares suelen aumentar de tamaño, en especial las parótidas, como consecuencia de la acción de vomitar.

¿Qué hacemos, si no podemos evitarlo? Ya sabemos que normalmente eso no es un acto voluntario, y que si se pudiera evitar, todos lo haríamos. ¿Cómo proteger nuestra boca? tomando pequeñas cantidades de frutas, vegetales, yogur o queso a lo largo del día, usando colutorio fluorado diario y enjuagándose la boca con agua después de cada vómito.

Podéis preguntaros, ¿cuál es el mejor momento para acudir al dentista?
Puedes visitarle y recibir tratamiento dental en cualquier momento de su embarazo, sin embargo te será más cómodo hacerlo en el segundo trimestre. Tu dentista se encargará de darte los consejos necesarios para mantener una boca sana.

¿Creíais que habíamos terminado? ¡También tenemos para el bebé!

Muchas personas pueden pensar que al ser bebés y no tener todos los dientes, o al no masticar alimentos tal y como lo hacemos nosotros los adultos, no debemos mantener una higiene pulcra en su boca. Después de la erupción de los primeros dientes (en torno a los 6 meses), límpiaselos con una gasita y agua o un cepillo pediátrico ultrasuave después de las comidas.

¡Importante! No dejes al bebé acostado con el biberón (salvo que contenga agua)

Después del parto, la mamá tiene que cuidar su boca de igual manera que cuando estaba embarazada. Acuérdate que tu saliva tiene bacterias: no contamines la cuchara del bebé, chupete o biberón.

¿Qué os ha parecido la entrada de hoy? ¿Os ha faltado algo? Ya sabéis, ¡para cualquier duda o más información sólo tenéis que dejar un comentario y contestaremos tan brevemente como podamos!

Enhorabuena a todas las mamás y a las futuras mamás... ¡seguro que lo hacéis genial! Recuerda que una buena salud oral durante el embarazo tiene un impacto positivo en tu salud y en la de tu bebé.


Os dejamos estas barrigas tan chulas que hemos visto... ¡Nos encantan!


miércoles, 1 de julio de 2015

"Piercings" y la cavidad oral

¡Buenos días! ¿Cómo estáis?
Nosotros aquí un día más junto con todos vosotros, para hablaros de los piercings en la cavidad oral (labios, lengua, frenillos...)

Todos sabemos que ese tipo de pendientes pueden resultar atractivos para algunas personas, pero nos parece conveniente que sepáis de los riesgos de llevarlo.

Aquí una servidora, llevó piercing en el labio inferior durante un tiempo determinado, así que puedo compartir con todos vosotros mi experiencia.

Primero vamos a hablar sobre qué problemas de salud puede provocar un piercing en la boca.
Debo puntualizar, que, no sólo puede darnos problemas a nivel de la cavidad bucal, también puede afectar a nuestra salud general, por ejemplo:

  1. Infecciones: la herida provocada por el piercing unida a la gran cantidad de bacterias presentes en la boca y la introducción de nuevas bacterias por el manejo del piercing provoca un aumento de las infecciones en la boca.
  2. Transmisión de enfermedades: el piercing es un factor de riesgo potencial de transmisión del herpes y hepatitis B, C y VIH
  3. Endocarditis: Debido a la pequeña herida que se genera tras la colocación del piercing, hay posibilidad de que entren bacterias al corriente sanguíneo y puedan conllevar a endocarditis (una inflamación del corazón y sus válvulas) en personas con problemas cardiacos que pueden no estar diagnosticados de antemano
  4. Daño de nervios/sangrado: La colocación del piercing puede dañar el nervio y perder la sensibilidad en la zona dónde está colocado o provocar problemas de movimiento, especialmente señalando a los piercing de la lengua.
  5. Enfermedad periodontalesto es tan sencillo como que el piercing puede dañar las encías provocándoles heridas y su recesión, lo que puede comportar dientes sueltos e incluso llegar a su pérdida.
  6. Daño a los dientes: Los golpes que reciben los dientes por los piercings pueden provocar la rotura de algún diente.
  7. Reacción alérgica al metal
  8. Tragarse el piercing

Todos estos riesgos están ahí, y son totalmente existentes. Ahora bien, ¿te pasarán a ti si te haces un piercing? Esa es una pregunta que jamás podríamos contestar, ya que a cada persona le afecta de una manera diferente, o no le afecta.
Me imagino que os gustaría que os contara mi experiencia, ya que yo sí os puedo hablar en primera persona de qué manera me afectó a mí.

Llevaba un piercing similar a éste:

¿De qué manera afectó en mi cuerpo?
Este tipo de piercings, que dentro tienen como una especie de placa plana que choca contra el diente, provocan, casi siempre, una recesión gingival. En mi caso, fué así.

¿Qué es una recesión gingival? Se muestra en esta fotografía
 
Esto es lo que puede provocar un piercing colocado en esa parte del labio. Para que nos entendamos; el piercing choca constantemente contra la parte blanda de le encía (parte muy sensible) y finalmente hace que desaparezca. ¿Qué pasa si esto continúa? Puede que el diente comience a moverse por falta de sustento, y que finalmente, caiga. (En casos muy extremos)
 
Un consejo que os doy (y que lo pido como favor personal si decidís colocaros un piercing)es que jamás juguéis con la barra y la desplacéis hacia dentro con los dientes: haréis vuestro agujero más grande y mucho menos estético.
 
Otra advertencia importante: Nunca os hagáis un piercing vosotros mismos, o personas no cualificadas para hacer éste tipo de práctica. Aunque pueda parecer fácil, o que un amig@, vecin@, familiar sabe, no sabe realmente si algo puede salir bien, o mal.
Corres el riesgo -entre otros- de llevarte por delante un nervio y perder la sensibilidad de la zona.
 
¡Cuidado, por favor! Es decisión vuestra, estudiad bien los pros y contras y siempre, siempre, siempre con supervisión de alguien que sabe bien lo que hace.
 
¡Gracias! Para cualquier duda, experiencia que pueda ayudar a los demás u opinión, podéis dejar un comentario.
 
                                                  ¡Disfrutad del día!
 



martes, 30 de junio de 2015

Halitosis, ¿se puede remediar?

En esta segunda entrada queremos hablar sobre la halitosis. ¿Por qué?
Es algo que afecta a una parte amplia de la población, y puede venir dada por varios factores.
 
 
                                                  ¿Qué es la halitosis?

La halitosis, también conocida como mal aliento, se define como el conjunto de olores desagradables que se emiten por la boca. Es un problema que afecta a una de cada dos personas.
Se considera un problema de carácter social relacionado con una higiene bucal deficiente o con enfermedades de la cavidad oral, aunque en ocasiones puede ser una manifestación de alguna otra patología.

                                                    ¿Cuál es el origen?

En función de su origen, existen dos tipos de halitosis: la halitosis oral y la halitosis extraoral.
  1. Halitosis oral: proviene de la propia cavidad oral y se debe principalmente a la acumulación de biofilm oral (placa bacteriana) en la lengua. Aunque también puede estar causada por otras situaciones como: problemas periodontales, caries dentales, hábito de fumar, entre otras. Según ciertos estudios, la Halitosis oral corresponde al 90% de los casos.
  2. Cuando la halitosis se origina fuera de la cavidad oral, se denomina halitosis extraoral. Se debe principalmente a trastornos sistémicos, del tracto respiratorio superior/inferior, del sistema digestivo, así como enfermedades hepáticas o renales. Y ésta corresponde al 10% de los casos.
                                               


                                                              Causas

                                         
 La producción de sustancias malolientes, los más frecuentes los Compuestos Volátiles de Sulfuro (CVS), se asocia a los productos resultantes de la degradación del metabolismo de las bacterias, generalmente las bacterias anaerobias gram-negativas, que se localizan principalmente en la zona posterior del dorso de la lengua y en otras localizaciones como bolsas periodontales.
Las causas de la Halitosis oral pueden ser patológicas y no patológicas.


                                                Las no patológicas serían:

  • Aliento matutino: durante el sueño el flujo de la saliva disminuye, ello facilita el crecimiento incontrolado de bacterias productoras de gases malolientes.
  • Edad: la calidad del aliento cambia con la edad. Es probable que los ancianos sufran cambios regresivos en las glándulas salivales y afecten a la calidad y cantidad de la saliva, incluso con una buena higiene bucal.
  • Prótesis dentarias: las dentaduras postizas y puentes pueden acumular restos de comida. Si se dejan toda la noche se produce un desagradable y característico olor.
  • Fármacos: existen medicamentos que producen xerostomía (boca seca), como los anticolinérgicos, antidepresivos, etc. La saliva favorece la limpieza de cavidad oral y reduce el mal olor. 
  • Tabaco: fumar crea un aliento característico que puede durar algunos días más, incluso después de haber dejado de fumar.
  • Periodos de ayuno: saltarse las comidas y llevar una dieta hipocalórica puede favorecer el mal aliento.
  • Dieta: después de la ingesta de algunos alimentos (cebolla, ajo) o el consumo de alcohol, ciertos metabolitos pueden absorberse a nivel gastrointestinal, pasan a la circulación, se metabolizan en la mucosa e hígado y son expulsados por los pulmones.
            
                                                        Las causas patológicas:

  • Enfermedad periodontal, caries.
  • Higiene oral deficiente, la falta de eliminación de biofilm oral (placa bacteriana), provoca el crecimiento bacteriano. Los lugares donde se suelen acumular las bacterias son la lengua, espacios interproximales, área subgingival, abscesos. La lengua es la localización de mayor predominio de las bacterias anaerobias en la boca.
  • Causas ulcerativas: úlceras traumáticas, infecciosas, estomatitis.
  • Faringe: infecciones víricas, bacterianas o fúngicas.
  • Necrosis por radioterapia y quimioterapia en pacientes con neoplasias.

Las causas de la Halitosis extraoral podrían ser: nasales (sinusitis), enfermedades digestivas, enfermedades respiratorias, enfermedades sistémicas (diabetes mellitus mal controlada, infección renal, disfunción hepática, Síndrome de Sjögren, artritis reumatoide, etc.).

                                                           Diagnóstico


En general, la Halitosis es difícil de diagnosticar, ya que es improbable que uno mismo detecte su propio mal aliento. En algunos casos el mal aliento simplemente se sospecha. Ante la duda, se recomienda consultar el tema con alguna persona de confianza, quien podrá detectar con mayor facilidad la presencia de mal aliento. 


Desde el punto de vista asistencial, la ayuda de un profesional del área odontológica puede contribuir en el diagnóstico. En la exploración de un paciente con Halitosis se involucran aspectos fundamentales, como el estado de salud general junto con el estilo de vida (costumbres y hábitos), también la situación oral y sus hábitos de higiene. Además, se debe realizar una medición cuantitativa del mal aliento.

                                                               Tratamiento 

 

Si de verdad quiere saber qué es lo que está causando su mal aliento, piense en concertar una cita con su dentista. Conociendo su historial médico y dental completos y realizando un examen de la boca, el dentista será capaz de identificar el foco del problema. Pueden existir muchas causas de mal aliento, entre ellas ciertos alimentos, el alcohol y el tabaco, una higiene bucal inadecuada, periodontitis, diabetes, el síndrome de la boca seca, sinusitis o infecciones de garganta, abscesos o infecciones en los pulmones, insuficiencia renal/hepática, problemas gastrointestinales y dietas de adelgazamiento excesivas.


Es importante limpiarse muy bien la boca en casa tres veces al día con un cepillo y una pasta de dientes antibacteriana con flúor, así como hilo dental para eliminar cualquier resto de alimentos o la placa de los dientes, las prótesis y los implantes. También hay que cepillarse la lengua para eliminar las bacterias que causan malos olores. Un estudio publicado en una revista científica mostró que cuando se combina el cepillado de dientes y lengua con el uso del hilo dental durante dos semanas se reducen significativamente las hemorragias en las encías así como el mal aliento. Otro estudio clínico realizado por investigadores dentales de la Universidad de Buffalo confirmó que cepillarse los dientes dos veces al día con pasta de dientes antibacteriana utilizando un cepillo provisto de limpiador de lengua puede eliminar el mal aliento.

Existen, entre otras muchas herramientas,  los "limpiadores de lengua" para minimizar o prevenir esta patología. Los podemos encontrar en supermercados tan comunes como "Mercadona" o en farmacias de marcas más específicas. (Halita, Dentaid...)



 

 

Por todo esto, recomendamos siempre visitar al odontólogo para que pueda valorar si es existente esta halitosis, cuánto de avanzada está la patología, y la posible existencia de otras patologías fuera de la rama odontológica.

 
¡Muchas gracias! Si tenéis alguna duda, no dudéis en ponerla por aquí y la contestaremos tan brevemente como podamos.